Cuando se presenta un error en el pedimento, una de las herramientas disponibles para corregirlo es la justificación. Sin embargo, para que esta sea aceptada sin contratiempos, es necesario cumplir con ciertos lineamientos técnicos, documentales y normativos. 

A continuación, te compartimos los pasos clave para asegurar que tu trámite de justificación sea exitoso: 

 1. Prevalidación técnica: El primer filtro 

Antes de enviar cualquier solicitud de justificación, es indispensable realizar una verificación previa del archivo de validación a través del Prevalidador RECO, autorizado ante el SAT con la clave 055. 
Esta etapa permite detectar inconsistencias anticipadamente y corregirlas antes de su envío formal a la aduana. 

2. Expediente completo en formato PDF 

El trámite debe enviarse con todos los documentos necesarios integrados en un solo expediente en formato PDF. 
Esto incluye el pedimento y sus respectivos anexos. 
Recuerda que la aduana evalúa exclusivamente con base en la documentación recibida, por lo que cualquier omisión puede derivar en el rechazo del trámite. 

3. Sustento legal y regulatorio 

Cada justificación debe contar con un fundamento legal claro y aplicable al caso. 
La autoridad aduanera necesita elementos normativos sólidos para poder emitir una resolución favorable. Incluir el sustento correcto es clave para garantizar la validez del argumento presentado. 

4. Envío dentro del horario establecido 

Cada aduana cuenta con horarios específicos para la recepción de trámites. 
Por ello, es fundamental enviar la justificación dentro del horario permitido, ya que los envíos fuera de tiempo podrían no ser procesados o incluso rechazados automáticamente. 

5. Revisión final y envío a la Aduana 

En RECO, nos aseguramos de que el pedimento coincida con la documentación anexada, y que el sustento legal corresponda con los errores detectados por el validador. 
Solo después de una revisión integral y precisa, enviamos el trámite directamente a la Aduana, reduciendo riesgos y optimizando tiempos de respuesta. 

¿Por qué utilizar el Prevalidador RECO?  

El Prevalidador RECO no solo está autorizado por el SAT, sino que además agiliza el proceso de revisión y corrección antes de cualquier envío oficial. Su tecnología permite detectar errores con antelación y garantizar que tu trámite cumpla con los requisitos técnicos necesarios. Utilizar esta herramienta es sinónimo de prevención, eficiencia y respaldo.