En la era del comercio global, la eficiencia ya no es el único indicador de éxito. Hoy, la sustentabilidad logística es un imperativo de negocios y un factor decisivo de competitividad.

La conversación sobre el futuro del comercio exterior ya no puede separarse de la sostenibilidad. Esta fue la conclusión central del primer foro “Eco-conexiones Portuarias”, un encuentro organizado por Geocycle Latinoamérica y SAN&ECOL con expertos de la comunidad portuaria de Veracruz, al que asistí recientemente. Este diálogo constructivo deja claro que el recinto portuario de Veracruz no solo busca ser líder en logística, sino también en responsabilidad con su entorno.

La autoridad portuaria ASIPONA Veracruz ha asumido este compromiso ambiental con gran seriedad, demostrando una visión de sustentabilidad que se traduce en acciones concretas.

Desarrollo sostenible: los pilares de la transformación
Dentro del recinto, la sostenibilidad se manifiesta en acciones precisas que garantizan una gestión portuaria de vanguardia:

1. Eficiencia energética y reducción de emisiones
   La modernización del puerto incluye la adopción de tecnologías limpias en su equipamiento operativo y la iluminación de bajo consumo (LED), reduciendo el consumo energético. Además, las inversiones estratégicas en infraestructura eléctrica de alta tensión sientan las bases para futuros proyectos de electrificación de muelles (cold ironing), cuyo objetivo final será reducir el uso de motores auxiliares de los buques atracados.

2. Manejo de residuos y aguas
   Gracias a la certificación ISO 14001 como sistema de gestión ambiental, la gestión responsable de los desechos es obligatoria. El puerto opera bajo regulaciones que:
   • Prohíben el vertido de aguas de lastre, sentinas y residuos sólidos u oleosos en la bahía.
   • Establecen un sistema obligatorio de recolección selectiva de residuos generados por buques y terminales, incluyendo el manejo especializado de desechos peligrosos según el Convenio MARPOL 73/78.

3. Infraestructura y planificación sostenible
   La expansión de la Bahía Norte sirve como un modelo de planificación responsable. Su diseño se ejecutó bajo estrictas condicionantes de SEMARNAT, asegurando la protección del ecosistema marino y arrecifal cercano. Este enfoque se complementa con la gestión de Unidades de Manejo Ambiental (UMA) que preservan más de 70 hectáreas de biodiversidad, y con el plan de crear un arrecife artificial para regenerar los ecosistemas del Sistema Arrecifal Veracruzano.

Estas iniciativas reducen costos operativos a largo plazo y hacen al puerto más atractivo para navieras y empresas globales con objetivos propios de ESG (Environmental, Social and Governance). El Puerto de Veracruz demuestra que el liderazgo en el comercio exterior ya no puede separarse de la responsabilidad ambiental. Sus avances en infraestructura, eficiencia operativa y su compromiso con la sostenibilidad lo posicionan como un hub clave para una logística internacional responsable y con visión de futuro.

Sería importante que más actores de la cadena agentes aduanales, transportistas, terminales adopten prácticas sustentables y, con ello, asegurar que el principal motor económico del Golfo de México avance hacia un futuro más limpio para toda la cadena de suministro.